Sin técnica, no hay espacio para el virtuosismo. Hay espacio, sin ella, para el talento pero no para conseguir la máxima expresión de todo el potencial y el desarrollo estructural de piezas complejas. La técnica sólo sirve si se puede poner a prueba, si es carne de entrenamiento diario y constante.
Hablar de técnica teatral , es como hablar de todo un poco porque a pesar de grandes corrientes, lo que queda, después de tanta prueba, es un complejo compendio de retazos prietos y diferentes a la luz del genio o del talento que no se manifestaría pleno sin ella.
Valorar una u otra técnica, es un proceso individual que requiere sacar del baúl de los recuerdos, procesos del todo subjetivos que van a engancharse a tu máximo objetivo o misión en el arte.
La capacidad organizativa de los procesos caóticos que, en mí, despierta la creatividad que aguarda en todas las esquinas de mi vida, son siempre debidos a un exhaustivo control de técnicas varias. La técnica que termina oprimiendo el alma, también tiene una técnica que libera de cadenas a esa creatividad aturdida de impresiones rotas por el esfuerzo constante de alcanzar virtuosismo en cada una de las partes que conforman la tarea.
Hablando de Gianni Rodari, y su "Gramática de la Fantasía"
Sin duda este téxto es de una utilidad única si lo pones a prueba como técnica. EL DESARROLLO DE LAS ESTRUCTURAS QUE FACILITAN EL DESPLIEGUE DE LA CREATIVIDAD, depende de tu capacidad de asociación y de interacción con otras materias para convertirlo en un canal adecuado que proporcione riqueza a todas tus habilidades.
De entra todos los juego, mi preferido es el BINOMIO FANTÁSTICO, sin este concepto, yo no habría podido crear mundos donde el Arte y el Marketing trabajar juntos, el Arte y el Branding crearan mundos donde Marketing decidiera vivir, donde listos y submarinos pudieran convivir, donde el cielo y el incienso pudieran tomar copas juntos, donde orientación a producto pudiera conversar con orientación a servicios, donde deshonestidad y zapatos compartieran encuentros.
Sin la tensión de un conflicto de imágenes o conceptos contrapuestos no nacería la creatividad porque la creatividad es el fuerte deseo de aunar contrapuesto.
El binomio fantástico
“Es necesario que haya una cierta distancia entre las palabras, que una sea lo suficientemente diferente de la otra, y que su aproximación resulte insólita, para que la imaginación se vea obligada a ponerse en marcha y a establecer, entre ambas, un parentesco, un conjunto (fantástico) en que puedan convivir los dos elementos extraños.”
“En el “binomio fantástico, las palabras no se toman en su significado cotidiano, sino que se las libera de las cadenas verbales de las que normalmente son parte integrante. Estas son lanzadas unas contra otras en un cielo nunca visto, Y es en este momento cuando se hallan en las mejores condiciones para generar una historia”
Gianni Rodari
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