viernes, 3 de junio de 2011

Primavera en blanco y negro



 O quizá llegue, esta preferencia, traspasando como una flecha la necesidad de conseguir la serenidad que traen noches clarioscuras que permiten a la mente juguetear con la inocencia en el silencio donde puedes encontrarte, a solas, con pensamientos que se enganchan a las estrellas, hasta que llega el sol de la mañana para imprimirles la fuerza con que se pintará el día que se levanta.


Sea como sea, no te venderé conclusiones que si para mi pueden ser ciertas, quizá no muevan las telas que dejen abiertas puertas. Por elegir yo elijo y siempre me quedo allí donde Marketing toma bifurcaciones para convertirse en Marketing de relación y Marketing de experiencias.

Decían, las malas lenguas que rodeaban infancias tiernas en islas paradisíacas, que la que fue allí Coralina de Colores para pasar a llamarse Araceli Marrero tierra adentro y desembarcar en costas virtuales como AraceliMásArte   que "Era imposible atar cortas, ansias de tanto vuelo donde descubrir paisajes nuevos" y yo digo, que desde los claros y sombras con que se perfila en mundo creativo se explota hacia a fuera en multitud de colores que invaden la vida entera pero que es preciso, dentro muy dentro, vivir a gusto y cómodamente persiguiendo humos que se vuelven grises al clarear la noche oscura.

Dos semanas llevo paseando plazas que huelen y tiene color de esperanza, dos semanas que traen recuerdos de Nodos y escenas televisivas pintadas en blanco y negro. Certezas claras y oscuras de una España dividida por la incapacidad para poder creer en el hombre para desembarcar en las plazas que gritan que hoy será el día en que empezamos a pintar el mundo de miles de colores. De aquello barros, estos lodos, dicen las viejas lenguas que se recogen toneladas de pecados católicos y karmas orientales y sin embargo, de entre el dolor que causan palabras mal usadas vendedoras de conciencias salta la visión de los efectos que nacerán de las causas que en estas plazas se plantan dibujando un nuevo dicho para una generación nueva "De aquello lodos, campos que explotan en millones de colores que revientan en primavera" 

Dos semanas, paseando por el futuro con el pasado agarrado a las espaldas donde la agresión se convertía en el lupanar donde tomabas a la palabra por la punta de la lanza que causaba tu dolor. Dos semanas para descubrir que el dolor que te causaba el que tenías justo al lado, no era más que un montaje escénico que aprovechaba la injusticia para campar a sus anchas robando la decencia de todo el que termina creyendo en la convención que te están vendiendo.  

He visto la cara de la sorpresa que el 15M llenó de ilusión corazones dolidos. He visto burla y agresión del que, ciego de egoísmo, cree comprar, con viles actos, el favor de quien no tiene más cara que la avaricia. Vi crecer el magnífico ejemplo de una sociedad a la que llaman cobayas en medios de comunicación. Sentí, toqué y comí la dulzura de la esperanza. Palpé el miedo a la diferencia mientras degustaba la riqueza de la tolerancia. Oí insultos, mentiras y como la acción rompía malas conciencias. Vi el pago sucio a mercenarios de la porra y la palabra. Percibí la torpeza de quien aún no recuerda que por encima de todo está el ser humano y vi todos les daban la mano, a que antes aparentaba ser malo, para limpiar heridas viejas. Fui testigo de como la violencia desataba tormentas de llanto e impotencia. Vi rojo sangre, heridas abiertas por armas pagadas por quien tiene miedo de enfrentarse a la visión de si mismos como parte del resto en #acampadasol #acampadabcn #acampadaparis. Vi a la codicia agazapada en corazones aún tiernos y corazones muy viejos pero de entre toda esta descomunal batalla vi salir, por los ojos de millones que dan luz al mundo entero, la infinita alegría que da la esperanza pura que admite que el ser humano es un ser social e increíblemente amoroso. 

Y ahora, en medio de la serenidad que aporta el blanco y el negro, cerraré los ojos para abrirlos y pintar de primaveras el mundo entero.

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